COROIDES

Es un tejido conectivo laxo, contiene una profusa red vascular de mayor fluido con vasos sanguíneos de diversos grosores. Con coloración parda oscura, por su rica vascularización se asemeja al corión fetal, de ahí su nombre. La coroides es homóloga a la pioaracnoides. Es muy delgada midiendo en su porción posterior 250 µm y anterior 100 µ, se inserta por anterior con la esclera dejando un espacio virtual llamado espacio pericoroideo; y por interior está unida al epitelio pigmentario de la retina (que en los casos de desprendimiento de retina este queda unido a la superficie interna de la coroides). La coroides se divide en cuatro capas, desde afuera hacia adentro. En la parte externa está unida en forma laza con la esclerótica separadas por el espacio pericoroideo que es un espacio virtual, está ocupado por la lámina supracoroidea que no tiene límite preciso y esta se continúa en la lámina fusca de la esclerótica. De interno a externo presenta (ver figura 5):

a.    Lámina supracoroidea o epicoroidea
b.    Sustancia propia
c.    Lámina coriocapilar
d.    Membrana de Bruch.

 

a.    Lámina supracoroidea o epicoroidea

Mide unos 30 µm de espesor, se compone de membranas planas agrupadas por delgadas fibras de colágeno y elásticas; las fibras conforman un reticulado laxo entre medio de numerosos fibroblastos y melanocitos, con largas prolongaciones. El color de la capa se debe a los de gránulos de melanina de los melanocitos.

 

b.    Sustancia propia

Es la mayor composición de la coroides, está formada un denso reticulado de arteriolas, vénulas y pequeñas venas. 
Las arteriolas son ramas de las arterias ciliares posteriores cortas, van de número de 6 a 8 cercanas al nervio óptico, posteriormente se dividen entre 15 a 20 ramificaciones las cuales perforan la esclerótica en un anillo alrededor del nervio óptico y transcurren hacia adelante por la coroides para anastomosarse con ramas recurrentes de las arterias ciliares posteriores largas y arterias ciliares anteriores. Las arterias ciliares posteriores largas, por lo general son dos y traspasan la esclerótica a cada lado del nervio óptico y trascurren hacia adelante, a través de la coroides hasta el cuerpo ciliar y el iris. Las arteriolas de la sustancia propia irrigan la red capilar de la lámina coriocapilar.
Las vénulas son la mayor parte de los vasos sanguíneos de la coroides, estás drenan en 4 sistemas espiralados en la parte externa de la coroides para luego unirse en las 4 venas vorticosas cercanas al ecuador del ojo, cada una de éstas drena uno de los cuadrantes del bulbo ocular y perforan la esclera por cuatro conductos emisarios en forma oblicua.
El estroma corresponde a tejido conectivo laxo con numerosa cantidad de macrófagos y melanocitos, estos últimos cumplen la función de generar melanina para absorber la luz que atraviesa la retina y así no interfiera el reflejo hacia la retina. También se encuentran de manera asilada linfocitos, células plasmáticas y mastocitos. 

 

 

c.    Coriocapilar

Está irrigada por las arteriolas de la sustancia propia y drenan en las vénulas de la lámina coriocapilar. Su función es irrigar la parte periférica de la retina (desde el epitelio pigmentario hasta la capa plexiforme externa). Las hendiduras entre los capilares contienen delgadas fibras de colágeno y elásticas, para conferir así rigidez a la red capilar. Las fibras elásticas continúan hacia la retina en la lámina externa de la membrana de Bruch. Cabe destacar que la coriocapilar es la única capa de la coroides que no se prolonga en el cuerpo ciliar, finalizando en la ora serrata.

 

 

d.    Membrana De Bruch

Estructura conformada por cinco capas, desde la más interna son: Membrana basal del Epitelio pigmentario de la retina, zona colagenosa laxa interna, capa media de fibras elásticas, zona colagenosa laxa externa, membrama basal del endotelio de la coriocapilar.