ESCLERA
La esclera (griego skleros: duro) es un tejido fuerte y resistente que rodea los 5/6 posteriores del ojo como una cápsula protectora, al ser una capa fibrosa gruesa compuesta por tejido colágeno denso irregular y fibras elásticas, lo que la hace opaca y de color blanco.
En cuanto al componente celular presenta fibroblastos y algunos melanocitos. La esclera es más gruesa en la parte correspondiente al polo posterior (alrededor de 1 mm), pero el espesor disminuye gradualmente en dirección anterior hasta alcanzar un valor mínimo de 0,3 – 0,4 en el ecuador mm por debajo de los tendones de inserción de los músculos rectos y de 0,7 mm a la altura del limbo corneoescleral.
La presión intraocular origina cierta distensión de la esclera estabilizando la posición de las demás capas y estructuras del bulbo ocular, cabe destacar que cuando aumenta la presión ocular, por lo general cede la córnea.
Es atravesada por el nervio óptico y también por vasos y nervios hacia o desde el bulbo ocular.
En la nomeclatura antigua, se distinguían 3 capas:
a. Lámina epiescleral o epiesclerótica
b. Sustancia propia, esclerótica propiamente dicha
c. Lámina fusca o capa supracoroidea
Figura 3.- Fotomicrografía Esclera, H-E, x4: Se observa la poca definición que existe entre las tres capas de la esclera.
a. Lámina epiescleral o epiesclerótica
La lámina epiescleral se compone de tejido conectivo laxo, es contigua al tejido adiposo peroobitario. Contiene mayor número de vasos sanguíneos que la sustancia propia. Hacia adentro la capa se hace cada vez más densa y se continúa con la sustancia propia no teniendo un límite definido entre esta.
b. Sustancia propia, esclerótica propiamente dicha
La sustancia propia de la esclerótica se compone casi con exclusividad por haces de fibras de colágeno gruesas (contienen colágeno tipo I y III), separados por escasa sustancia fundamental de proteoglucanos. Los haces de fibras de la sustancia propia presentan, en su mayor parte, una disposición paralela a la superficie de la esclerótica. En la zona del limbo y alrededor de la lámina cribosa, los haces forman círculos concéntricos, mientras que en el resto de la esclerótica presentan orientaciones variables.
c. Lámina fusca o capa supracoroidea
La lámina fusca es la parte más interna de la esclerótica, encima de la coroides. Su nombre está dado por la característica de presentar melanocitos y macrófagos que contienen melanina (latín fusco: oscuro). Contiene fibras de colágeno más delgadas y bastantes fibras elásticas, no hay un límite definido con las laminillas del tejido conectivo de la lámina supracoroides.